La forma de las hojas de bambú en la parte posterior de la tortuga es peculiar, con agujeros y grietas que se asemejan a la parte posterior de una tortuga. Hay grandes cicatrices de hojas en forma de media luna en los nodos, con un cordón como raíces aéreas carnosas, extremadamente tolerantes a la sombra, lo que la convierte en una gran planta de follaje en maceta interior.